Una rápida búsqueda en Wikipedia arroja lo siguiente: El escorpión y la rana es 0una fábula de origen desconocido, aunque generalmente atribuida a Esopo. La moraleja de esta breve historia es la siguiente: la ambición de algunos es tan desmedida que preferirán arrasar con todo, porque está en su naturaleza, generando incluso su propia destrucción.
Esta fábula viene a colación, en Venezuela, dado el regreso del esquema de controles sobre la producción y la comercialización de alimentos, que parecía descartado. Pero no, los controles y la represión están en la naturaleza del chavismo.
Un escorpión le pide a una rana que lo ayude a cruzar el río, prometiendo no hacerle ningún daño, puesto que, si lo hacía, ambos morirían ahogados. La rana accede, subiéndolo a sus espaldas, pero cuando están a mitad del trayecto el escorpión pica a la rana. Esta le pregunta incrédula: “¿Cómo has podido hacer algo así? Ahora moriremos los dos”, ante lo que el escorpión responde: “No he tenido elección; es mi naturaleza”.
Para leer más, visite El Estímulo.