La baja participación en las elecciones internas de RD pone en duda la capacidad de convocatoria del FA. Si el partido más grande del FA solo convoca a 3.500 personas a votar, difícilmente esa coalición podrá dar la pelea a los partidos tradicionales de la NM en primarias abiertas.
U.S. decision makers must not let frustration or enthusiasm distract them from the importance of the Venezuelan people and the constitution. Any role for the U.S. military must be a limited, supporting one at most.
Maduro’s long-term survival is no longer feasible, but the timeline for his departure and a subsequent democratic transition is still far from certain. Here are three possible scenarios.
In the fourth episode of two gringos with questions, your hosts Chris and Ken talk to Francisco Rodriguez, Managing Director and Chief Economist of Torino Economics on Latin America’s 2019 economic forecast, Venezuela’s economic situation, and the case for not boycotting Venezuelan elections.
Resulta incomprensible que el gobierno del Presidente Piñera intente sacar al pizarrón a la ex Presidenta Bachelet precisamente cuando la izquierda chilena desesperadamente anda buscando un punto de unidad y un salvavidas para no hundirse. Ahora que el gobierno la emplazó, la izquierda chilena podrá convertir a Bachelet —que no puede ni quiere responderle a La Moneda— en la excusa para buscar reconstruir relaciones entre los distintos partidos.
Ahora que la oposición aparece dividida, el gobierno de Chile Vamos puede aspirar a construir una coalición ganadora mínima —una cantidad apenas suficiente de votos en el Congreso para pasar las reformas— a un costo mucho menor. En vez de buscar el apoyo de todo ese grupo, la actual administración podrá negociar con cada partido por separado.
El segundo gobierno de Piñera ha vuelto a repetir un error clave de su primera administración. La composición de los altos cargos de gobierno refleja las conexiones familiares y el origen de elite de sus miembros —el club de Cachagua— mucho más que el discurso de mérito y esfuerzo al que ahora apela para defender su propuesta de reforma educacional.
The events of January 23 were a victory for the once divided and dispirited Venezuelan opposition. But with Maduro so far refusing to step aside and a rogues’ gallery of governments lining up to support him, could the U.S. have stumbled into an international showdown?
Recent U.S. involvement in the Caribbean Basin has been defined by Whac-A-Mole-like reactionary policy. It’s time for a new coherent strategy for security and development in the Caribbean.
Mercosur must modernize to adapt to a new international geopolitical reality, but there’s no clear path forward. If it can’t reform, Mercosur risks joining the long list of failed dreams of regional integration.
