PDC, ¿Q.E.P.D.?
Si el liderazgo democratacristiano renuncia a definirse de izquierda y opta por ser un partido moderado, pragmático, razonable y ambidiestro, podrá aprovechar la gran opción de ser un partido bisagra que use su reducido número de legisladores para decidir cuándo la derecha será mayoría y cuándo lo será la izquierda. Es demasiado temprano para escribir el obituario del PDC, pero en la medida que su liderazgo se obstine en pelear infructuosamente un lugar como partido de izquierda, el partido seguirá cavando su propia tumba.