¿Fin de la tregua en la Araucanía?

La oposición debiera resistir a la tentación de salir a pegarle al gobierno y echar leña al fuego que ya amenaza con descarrilar los esfuerzos de paz en la región. Es tentador ponerlo a la defensiva, sumarle pasivos al capital político del ministro Alfredo Moreno o polarizar las posturas, pero esa estrategia es, además de peligrosa, dañina para el país.

Author

La muerte de Camilo Catrillanca amenaza con descarrilar los esfuerzos por construir una paz duradera y un desarrollo sustentable en la Araucanía. Por eso, abandonar ahora la voluntad por restablecer el estado de derecho y el normal funcionamiento de una sociedad democrática en la zona será más costoso para todos, especialmente para los residentes de esa región. Aunque sea tentador para la oposición agudizar las contradicciones y escalar la confrontación verbal respecto a las responsabilidades —aún por determinar— de la muerte del comunero mapuche, este no es el momento para intentar poner a la defensiva al gobierno y forzarlo a abandonar el Plan Araucanía.

Nadie puede negar que hay muchas cosas que no funcionan bien en la Araucanía.Todos los sectores involucrados tienen legítimas demandas y justificados reclamos respecto a cómo se ha manejado el conflicto hasta ahora. Hay muertos y heridos en todos los grupos que legítimamente sienten que ese es su hogar. Desde el retorno de la democracia, los esfuerzos de los sucesivos gobiernos han sido insuficientes o equivocados —dependiendo de las posiciones que tienen las distintas partes involucradas.

Pese a los esfuerzos de todos los gobiernos por reducir las tensiones y encontrar una vía que permita ‘normalizar’ la vida en la zona —esto es, hacer que esa región vea los niveles de violencia reducidos a lo que se observa en el resto del país—, la evidencia acumulada muestra que, mientras el resto de Chile vive un innegable periodo de paz y progreso social, en la Araucanía hay demasiada incertidumbre, demasiada violencia, y demasiadas balas.

Para leer más, visite El Libero

More Commentary

Scroll to Top